3 de noviembre de 2014
Queridos a la par que amigos, este curso sólo veo los alsas pasar de largo ante mis ojos, los sigo con la mirada; hay viajeros que suben, otros que bajan, conductores conocidos que me saludan; en fin, nostalgia de esa parte del fondo que tantas siestas de ojos entreabiertos acogía en tiempos no tan pretéritos…
¡No pasa nada! He decidido seguir con estas historias haya autocar o no. Comparto espera en la calle General Elorza con mucha gente «alsera», presto atención, soy todo oídos a sus historias… Ahí va una reciente de laísmo recalcitrante. Dos chicas que fuman como si el mañana fuese hoy mismo hablan a viva voz, gesticulando como mafiosas calabresas a las puertas de un golpe importante.
– Y mira que éramos buenas amigas…
– Ya, la vida es así, con sus sorpresas, con sus zarpazos.
– ¡Y me llamó loca… Y sinvergüenza! ¡Y la di una hostia bien dada!
– Jodeeer… ¿Y ella qué hizo?
– Se me quedó mirando alucinada; la di otra hostia.
– Esta segunda sobraba, ¿no?
– Calla, calla, que va la tía y me llama hija de la gran puta, ¡a voces!… la di una tercera hostia, claro, pero ésta tan, tan fuerte que la reventé un tímpano. El escándalo que montó la muy cerda, casi haciéndose la muerta. A fingir, venga a fingir. ¡Pedazo de comemierda!
– Buufff…
– Ahora voy p’allá, al puto juicio en la Pola. ¡Que no se me ponga delante, que la digo cuatro frescas…! ¡Y la meto otra hostia más, no será por falta de ganas…! ¡La cabrona!
Mientras pienso por qué no ha dicho “le cabrona”, por seguir una lógica divergente, ¡pip, piiiiip!, me pitan con premura desde un coche. Es mi compañera de trabajo, que lleva un rato esperando en su coche a que me dé cuenta de su presencia… La miro (sí, ahí «la») y me disculpo con un gesto justo antes de entrar apuradamente en el coche y contarle (contarla, según la de las tres hostias reales y la cuarta sólo en el deseo) ese diálogo tan bello y constructivo que acabo de escuchar.
El mundo está lleno de Ylenias y Belenes 😉
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Ya tu sabeh…
Es lo que hay, ¿vale?
Y así, hasta el infinito y más allá… de Cuenca, por decir un sitio con significado.
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Such conversation! I don’t like the «b» word used in that conversation but do hear it a lot. I always like coming to see what you write though 🙂
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It is mutual, Christy, I always love reading what you write, what you have to tell us.
Have a nice week, my friend!!
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Jajajaj… Como está la hostia aquí… Por poco y me dan un galletazo!!!
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Ten cuidado, Melba, que esta chica es un pelín violenta 😉
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Por eso, me saqué un poquito de la pantalla, no se fuera a salir un gancho a la izquierda.
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Pues yo, porque llegó mi compañera en su coche bien pronto, que si no alguna hostia de rebote fijo que me habría caído…
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Jajajaja
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